Estela Díaz: «En las denuncias por violencia de género la Justicia no puede funcionar con piloto automático»

La Ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, Estela Díaz, dialogó con Luisa Valmaggia en Radio Cooperativa AM 770 tras el femicidio de Ursula Bahillo, la joven de 18 años que fue asesinada por su ex novio policía en la localidad bonaerense de Rojas, luego de denunciarlo 18 veces consecutivas.

La Ministra aseguró en principio que «la muerte de Ursula era evitable» ya que «ella denunció, pidió ayuda, y el femicida tenía antecedentes en otras jurisdicciones. El juzgado de Rojas podría haberlo buscado y saber el nivel de peligrosidad. Aquí falló clarísimamente la evaluación del riesgo que en estos casos es vital».

Díaz relató que con el equipo del Ministerio «estuvimos en Rojas repasando todo lo que falló y acompañando a la familia» y criticó las medidas adoptadas «en piloto automático» del Poder Judicial. «A veces se toman medidas en los Tribunales como su fuera en piloto automático y todos los casos fueran en serie, cuando en realidad, en casos de violencia de género, hay que analizar muy minuciosamente el historial del caso y los indicadores de la situación, tanto del agresor como del que está sufriendo esa violencia, para tomar las medidas» sostuvo. «Muchas veces una medida perimetral puede ser un disparador de mayor riesgo y esto en Rojas es evidente. Estábamos ante una persona que ya no respetaba medidas perimetrales. Le habían sacado el arma reglamentaria en la Policía y le habían armado una carpeta. Había una cantidad de datos de violencia que ya tenía esta persona, que tenía un potencial femicida. Ahí es que no puede funcionar el piloto automático. Tiene que funcionar la rigurosidad en el análisis del caso» explicó.

Por otra parte, señaló la particularidad de que el agresor era efectivo de la Bonaerense. «Sin duda el factor de poder del agresor es uno de los factores de riesgo. El que sea policia, es uno de ellos, pero puede haber otro factor de poder, porque eso le permite aislar más a la víctima o lograr que se desestimen sus denuncias» aseguró.

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